Y de repente pensando
en caminos escondidos,
en calles sin sentido,
en pueblos sin castillos,
en hombres sin delirios...
En pasillos sin final,
en mares sin sal,
en el bien y en el mal,
en torres de cristal,
juro que...
En corazones valientes,
en amores corrientes,
en palabras ausentes,
en encuentros pendientes...
En horas lejanas,
en miradas extrañas,
en cargas pesadas,
en manos heladas,
juro que....
En besos al aire,
en suspiros distantes,
en ansias sobrantes,
en almas errantes...
En decisiones finales,
en hombres cobardes,
en puntos aparte,
en mis ganas de amarte...
juro que entristecí.