Hola...Como estas? Me pareció verte sentado en un sillón rodeado de personas de bar. Ella es mi hermana, dijo ella, me acerqué y sentí que tus labios eran reales, en cualquier momento yo despertaría y sabría que tenía que estar allí. Una hora antes pensaba no ir...
Supe que eras baterista y rondabas los veintes casi antes de saber que bebida quería tomar.
Esta es la entrada del bar? pregunté al llegar. Con unos labios rara vez rojos y un pelo naranja rara vez amarrado.
A veces volteaba y te veía en la ventana al lado del sillón, yo volvía la mirada a mi vodka... una vez más voltee a buscarte y ya no estabas... estabas frente mio oyendo a la banda de rock que sonaba en vivo, sonreí y bajé la cabeza buscando como parecerte interesante.
Ella se te acercó al oído, te moviste y te recostaste en la columna frente a la banda de rock, la luz del halógeno te pegaba en el cabello y un poco en la cara. Parecías ido escuchando la banda.
Yo me preparaba para irme, pues me esperaban mis amigos abajo y no podía hacer nada al respecto. Voltee y no estabas, volviste al sillón donde inicialmente te saludé. Agarré el bolso y me despedí de ella dos veces, porque por instinto era la única que me podía ayudar a volver a verte.
Caminé a la entrada sin querer que me vieras ir y no voltee al lado ni hacia atrás.
Me fui sin querer irme.
Y simplemente él no tenía ni la más pálida idea de lo que estaba dejando escapar.
ResponderEliminarjaja sí, pero bueno... ambos nos dejamos escapar o más bien nadie ha escapado... espero volverlo a ver.. soñaré con eso!!
ResponderEliminarY buenoooo...El se lo perdio :P...
ResponderEliminarGenial blog...Me paso y te ree sigo :D
Que andes mas que bien...
Besottez!!!!!! :)
Esas historias de noche tienen un toque romántico, incluso cuando la otra persona no tiene ni idea de que se perdió de algo.
ResponderEliminarAbraazo!! :)